Esta dictadura tan extraña

"Chávez, ese extraño dictador", así decía Eduardo Galeano y por extensión hoy en día hacemos auto-referencia de lo que ocurre en Venezuela.

En 1955, durante la dictadura de Pérez Jiménez, mi mamá tenía 5 añitos. Mientras caminaba a su casa se cruzó con la policía y le sacó la lengua. La patrulla se devolvió y la buscaron en su casa. Le dieron un regaño lo suficientemente intimidador para que hoy en día lo recuerde con claridad... Tuvo suerte.

2012, caminaba por la calle con una amiga. A unos diez metros adelante iban tres funcionarios de la Policía Nacional. De frente venían unos adolescentes, irreverentes en el andar, en el hablar, en el vestir, cabello largo, pantalones caídos, franelas anchas; eran patineteros. Al cruzarse en la acera, no cabían todos, se tropezaron, la policía se hizo a un lado, los adolescentes hicieron chistes... Mi amiga y yo bajamos el ritmo, yo creo que hasta me encorvé y tuve un "flash-back" de la Policía Metropolitana... Estaba esperando el peinillazo, el "contra la pared", el "cédula ciudadano". Esperaba la intimidación, la humillación, que los sometieran con irrespeto... Nada. Los muchachos les pidieron disculpas, la policía siguió de largo. En mi cabeza los paradigmas se contradecían, tantos años condicionada. Esos muchachos no tienen idea de lo que hubiera sido de ellos en los 90's. No lo saben, no lo vivieron.

Tengo un conocido, de esos que antes de que Chávez se hiciera inmortal, se vestía de rojo y "defendía" la Revolución... También viajó a Perú, Aruba, Miami, Las Vegas y raspó sus cupos. Compraba con su cupo y vendía en el mercado negro. El año pasado se "fue demasiado" a Nueva York, estuvo seis meses y se regresó, supe que estuvo trabajando en la cocina de una especie de lunchería, fregando platos, creo. Hace dos meses está en Miami, hace "transporte ejecutivo" (taxista fashion). Me cuenta una amiga que no están seguros de que regrese, que "está tramitando los papeles", que todo depende de que le admitan el asilo... "¿¡Asilo!?" grito yo. Y así es como me entero que el niño que de vaina y se habrá leído las "Lanzas coloradas", que de lo único que ha sido activista es de la Polar, está pidiendo asilo porque "siente que su integridad y su seguridad están amenazados por este rrrrrééééggggiiiimmmennnn". Le comento a mi amiga: "¿Y él sabe que han metido presos a varios venezolanos por estafa al sistema de inmigración por andar fabricando historias?". Pero parece que él si tiene chance, que "hay fotos". Yo, que no salgo de mi estupor, sigo buscando lógica en esta maraña "¿Fotos de qué? ¿De Diosdado persiguiéndolo en una moto?". Hay unas fotos en la que la policía lo persigue en una marcha... Aquella marcha cuando las guarimbas que se fueron a la autopista y trataron de meterse por Bello Monte al Municipio Libertador sin permiso y a la fuerza y los dispersaron con bombas lacrimógenas. "A mí que ese coño no me venga a hablar de corrupción, ni de Patria, ni de un coño. ¡Es un corrupto de mierda!" le dije a mi amiga para dar por terminada la conversación.
Pienso en mi gente. En los que sí saben lo que es ser perseguido. En mi abuelo que luchó contra Pérez Jiménez y estuvo preso por eso y que luego no perdonó que Betancourt los traicionara y también se alzó contra él. Recuerdo a los panas que en las pocas horas que estuvo Carmona auto-proclamado fueron perseguidos y algunos allanados y los que se fueron a organizar a la gente a la calle y garantizar el retorno de nuestro Presidente. Recuerdo a mi gran amiga, que llegó a Venezuela huyendo de la persecución paramilitar colombiana, que me contó llorando su historia y de como nuestro gobierno la recibió como asilada política.
El coño de su madre a ese conocido apátrida y a todos que como él se valen de las leyes internacionales para escupirle a la memoria y a las luchas legítimas, a nuestra bandera y a nuestro país. No les deseo bien, no puedo...

Esta dictadura tan extraña que les permite tomarse "selfies" frente a los cordones policiales, gritarles a los edificios de la Misión Vivienda, desde sus miserias internas y su fascismo "Malditos, arrastrados, lambe pisos, sucios, parásitos, cobardes...". Esta dictadura en la que dan ruedas de prensa con más de 50 periodistas para decir que están en dictadura y que hay un auto-golpe.

Por eso y por tantas, tantísimas cosas más: ¡NO VOLVERÁN!

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